Antes de cambiar de aires y mudarse a la que a partir del año que viene será su nueva sede en la Fira de Barcelona, el Salón del Manga se despide a partir de mañana de su tradicional emplazamiento en la Farga de L'Hospitalet hincando la rodilla ante los guerreros del antiguo Japón. Y no solo ante esos samuráis estilizados que aparecen en la obra del dibujante Hiroshi Hirata, máximo exponente de las historias ambientadas en el Japón feudal y gran reclamo del Salón, sino también ante un personaje de carne y hueso como Fujo Hirata, descendiente de una saga (real) de samuráis amén de monje, ex comisario de Otsuka y maestro de kendo, entre otras muchas cosas.
Original de Hirata
Así, mientras Hiroshi capitaliza la cuota autoral apadrinando una exposición en la que algunos de sus originales sirven de brújula para orientarse entre cómics sobre samuráis dibujados fuera de Japón y animes dedicados a tan célebres guerreros, Fujo Hirata ejercerá de voz de la memoria impartiendo una conferencia sobre la historia de los samuráis.
Pocos invitados
La mala noticia es que, más allá de estos dos personajes ligados al fascinante mundo de los samuráis, el Salón del Manga anda este año algo huérfano de invitados célebres y solo Kazue Kato, joven autora responsable del exitoso «Blue exorcist», y el cineasta Keiichi Hara, director de algunos de los animes de Shin-Chan, completan la nómina de estrellas invitadas a esta nueva edición del Salón que se alargará hasta el 1 de noviembre. Lo que no faltarán serán alunizajes más o menos curiosos como el de JYJ, una boy band surcoreana que causa auténtico furor en sus país y cuya popularidad ha comenzado a extenderse a otros países tras su colaboración con el rapero Kanye West.
La actuación del trío surcoreano, que arrancarán en Barcelona su tour europeo, será uno de los extras de un Salón que espera recibir a 65.000 personas y que, además del tradicional concurso de Cosplay («otakus» disfrazados de sus personajes de manga o anime favoritos», acogerá también una exhibición de esgrima con katanas, una muestra dedicada al kimono y una exposición dedicada a Victoria Francés, autora que si bien tiene poco que ver con el manga, aterrizará en el Salón con su inquietante universo gótico y vampírico.
Fuente ABC.
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