
Con esta reapertura, el Museo comienza una nueva etapa en la que, respetando el pasado, apuesta por el rigor y la veracidad del discurso expositivo, lo que ha implicado un cambio de nombre, de Casa Museo del Greco a Museo del Greco, una nueva imagen institucional y nuevos programas de atención al público.
"Esfuerzo visionario"

La base sobre la que la nueva institución ha querido dar respuesta a las necesidades de un museo actual y de sus visitantes fue un estudio realizado entre 2002 y 2003, con cuyos datos, análisis y conclusiones se han ido conformando sus nuevos programas arquitectónico y expositivo.
Respecto a la exposición permanente, las actuaciones se han centrado en la adecuación de espacios e instalaciones, la realización de nuevos elementos de soporte expositivo, la correcta señalización de itinerarios y servicios, así como de los sistemas de iluminación tanto arquitectónica como expositiva.
Vuelta a casa
"El Greco vuelve a casa –ha afirmado el presidente de la la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha–. En Toledo estábamos impacientes porque se volviera a abrir su museo, porque es un lugar de referencia para toda la ciudad y porque, efectivamente, desde que el marqués de la Vega-Inclán tuviera esa idea genial de organizar, con el pretexto fantástico de El Greco, un lugar de referencia para que el ciudadano se acercara a Toledo, y estando en la ciudad, a su vez se acercara al Greco, ha ido dando unos resultados estupendos".

El alcalde de Toledo, Emiliano García-Page, destacó en el acto de reapertura la potencialidad de El Greco como motor turístico y señaló que el artista, en esa identificación con Toledo, "significa trampolín para alcanzar lo que ambicionamos, y es que la ciudad pase de 2,2 millones de visitantes a los tres millones a la vuelta de cinco, seis o siete años".
Para celebrar la reapertura del Museo se realizarán unas jornadas de "puertas abiertas" con acceso gratuito al público general desde mañana al domingo.
El redescubrimiento
Desde la muerte del cretense, acaecida en abril de 1614, su arte fue cayendo en el olvido. Sus coloridas y alargadas composiciones dejaron de ser del gusto de sus contemporáneos que volvieron sus ojos hacia obras más realistas y cercanas, hasta acabar arrinconadas en el más absoluto desprecio e incomprensión. El Greco se convertirá en un pintor maldito, olvidado, extravagante y loco, creador de un arte alucinado y deforme, poco merecedor de estudios y de exposiciones hasta 1908, fecha en la que a raíz del estudio completo de sus obras que realiza el profesor de la Institución Libre de Enseñanza Bartolomé Cossío y de diversas muestras, comenzará a captar la atención de artistas y eruditos que redescubren en su pintura las técnicas más vanguardistas y las lecturas más dispares. El mito griego renacía para los modernos estudiosos y amantes del arte.
Entre estos amantes de la pintura destacaba Benigno Vega Inclán. El marqués, que combinaba a la perfección su faceta de marchante de arte con la de mecenas, ayudará a Cossío en su búsqueda de pinturas originales del cretense para poder realizar el catálogo completo de sus obras.
En una de sus estancias en Toledo será cuando –contagiado por el entusiasmo del profesor–, decidirá comprar una vieja y ruinosa casa en la judería toledana, muy cerca de donde estuvo la verdadera morada del Greco, el Palacio del Marqués de Villena, arrasado bajo el actual Paseo del Tránsito.
![]()
La colección
El conjunto de lienzos del Greco que Vega Inclán rescató de la destrucción, pagando su restauración, conforman su gran riqueza. Se puede apreciar un pequeño y excepcional conjunto de retratos, los de los hermanos Covarrubias, hijos del arquitecto de la Catedral de Toledo e ilustres humanistas; Las Lágrimas de San Pedro, compradas por el marqués en el comercio privado, constituyen un magnífico ejemplo de pintura devocional para oratorios privados. Pero la estrella de la muestra es el excepcional conjunto del Apostolado, una serie de doce apóstoles presididos por El Salvador, que configuran el conjunto más alucinado de miradas, gestos y actitudes que el visitante pueda contemplar. Ante su visión es imposible permanecer indiferente.
|
Hoyesarte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario